La selección de pigmentos para los colorantes no debe depender sólo de las propiedades técnicas de éstos, sino también de la interacción entre los polímeros y los aditivos. La procesabilidad y el rendimiento requeridos en la aplicación también deben tenerse en cuenta: la resistencia al calor, a la migración, al clima y al solvente. El pigmento seleccionado debe ser colorido y duradero, y no debe desteñir. Los métodos de control para los pigmentos utilizados en los colorantes se detallan a continuación:
1. Fuerza de tinte
La fuerza de tinte se refiere a la cantidad de pigmento necesaria para crear un producto de un determinado color. Se expresa como un porcentaje en una muestra estándar. Por ejemplo, se añade 1g de pigmento blanco A a una muestra de 1g para crear una mezcla de un color determinado. Luego, se toma una muestra de 1g de pigmento para hacerle pruebas y para añadirle el pigmento blanco gradualmente hasta lograr el color de la muestra bajo una luz estándar. La fuerza de tinte es: I=B/A×100% (B es la cantidad de pigmento blanco agregada) y se verá afectada por las propiedades del pigmento y su grado de dispersión. El grado de dispersión del pigmento se relaciona con su grado de refinamiento. Generalmente, la fuerza de tinte es mayor cuanto mayor sea el grado de dispersión dentro de un determinado rango de valores. Sin embargo, ésta disminuirá si el grado de dispersión supera un valor máximo. Más arriba se detalla la fuerza de tinte estándar de los pigmentos que se utilizan en tintas y recubrimientos.
El criterio de selección para los pigmentos para plásticos es similar, pero se sugiere la utilización de resina para el ajuste de color. Al cambiar el pigmento blanco del método anterior por la resina, la relación entre B y A será la fuerza de tinte del pigmento utilizado en plásticos cuando el color de la muestra estándar y el de la muestra de prueba sea el mismo. A es la cantidad de resina para paletas estándar y B es la cantidad de resina para las muestras de prueba.
2. Resistencia al calor
El nivel de resistencia al calor de los pigmentos utilizados en plásticos afecta al color y otras propiedades durante el procesamiento, donde se somete al producto a distintas temperaturas. El tiempo de calentamiento debe tenerse en cuenta cuando se prueba la resistencia al calor del pigmento, ya que este tiempo varía según el método y el uso que se le dé al producto. Por lo general, se requiere que el pigmento tenga una resistencia al calentamiento de entre 4-10 minutos. A mayor temperatura, menor es el tiempo de resistencia del pigmento.